Llegó la calaca flaca
muy emperfumada
para bailar toda la noche
en el Salón Tropicana.
Se pasó como en su casa
y sin saludar,
obtuvo las llaves
que le arrebató a Alex Fara, para entrar.
Luego, luego bailar,
determinó La Catrina,
bajo la brillante conducción
del Ingeniero Raziel y la Licenciada Carolina.
La calaca no paraba,
tenía mucha gasolina, y con Diana Michelle de su mano,
aumentó su adrenalina.
Las horas pasaban por delante
pero la huesuda no tenía enfado,
también bailó con Vicky Cervantes
y con la talentosa de Claudia Alfaro.
Pero se impactó la calaca,
en su noche de etiqueta,
al mirar la magnitud
de la belleza de Edith Landeta.
Otra belleza de la noche,
que a la calaca causó ensueño,
fue la presencia en Tropicana,
de Valery Pacheco.
Y se bailaba y bailaba,
era una noche sin fin, con invitados especiales,
encabezados por la linda Lupita Palmerín.
Al llegar la mañana
aunque cansada la calaca,
sentenció que no hay mejor lugar en la tierra,
que estar en Salón Tropicana.
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