La protestas estudiantiles en México en el año de 1968, no fue más que la expresión de una inconformidad ante un partido político que se había estacionado como supuesto defensor de los principios de la revolución levantada en lucha en 1910 pero que se transformaba en un saqueador, y la imitación de la rebeldía inspirada en la filosofía comunista y en sus caudillos cubanos. Tal situación causó presión exagerada en un gobierno que estructuraba una dictadura presidencialista única en el mundo, por su disfraz democrático, y que terminó en una matanza estudiantil. Tal tragedia para muchos no sirvió de nada para el levantamiento juvenil y ciudadano, pues el pueblo de México no obtuvo ni el mando del Estado ni el respeto de su gobierno, por lo cual llegaron otros actos vergonzosos como la nueva agresión a los estudiantes mexicanos en el sexenio entrante de Luis Echeverria, las elecciones presidenciales con una boleta conformada por un candidato presidencial único, así como las sucesiones presidenciales con resultados prefabricados, los fraudes electorales de 1988 y del 2006 y el disfraz de la derrota al PRI en el año 2000 quien al final regreso avalado por el partido sustituto en el 2012. Por eso se califica al Lópezobradorismo como un movimiento efectivo para el cambio de la vida política de México más que aquel movimiento estudiantil del 68, ya que a diferencia del fallido levantamiento en la plaza d elas tres culturas, la lucha democrática iniciada por Andrés Manuel López Obrador, además de ser pacifica, trajo consigo el desmantelamiento y derrota del PRI así como de sus partidos satélites cómplices, en donde el PRD y el histórico PAN confesaron ser lo mismo y hasta apoyaron a una candidatura única, se formó un movimiento que se constituyó en el Partido Político MORENA para lograr la revolución administrativa por la vía institucional y no en rebelión, también se desmantelo el abuso presidencialista desde el mismo mandato presidencial, se instalaron políticas públicas inéditas en la historia de México como lo es la ayuda económica directa, universal y por ley, además de democratizar al poder Judicial y conseguir que el derecho femenino se estampara en apoyar a una mujer para ser candidata a la presidencia del país y al final lograr la Presidencia de la República. Para otros analistas, aquel crimen estudiantil de 1968 en que sus responsables no tuvieron castigo, así como los hechos delincuenciales y los otros actos posteriores a la matanza de Tlatelolco, fueron antecedentes que sirvieron para que el México del pasado pudiera formar al México del presente, en donde por primera vez en su mando de Estado, se haya obtenido un gobierno de izquierda y una población politizada con un porcentaje mayor al ochenta por ciento en favor de su nuevo gobierno situación nunca antes vista en una dictadura presidencialista encaminada a dibujar al Presidente, como quien todo lo puede y a quien de todo se culpa. Más en www.somoselespectador.blogspot.com